Mi experiencia como artista independiente
- Lumehill
- 22 abr
- 2 Min. de lectura

Mi experiencia como artista independiente
La neta, hacer música independiente no es el camino más fácil… pero para mí, ha sido el más real.
Empecé sin saber bien a dónde iba. Solo tenía beats en la cabeza, emociones atoradas en el pecho y una necesidad brutal de sacar todo eso en forma de sonido. No había contratos, ni disquera, ni managers, ni promesas de fama. Solo yo, mis ideas, y la compu.
Pero eso es justo lo que hace que este camino se sienta tan vivo.
Subidas, caídas y loops infinitos
Ser artista independiente es como vivir en un loop. Hay días donde todo fluye: terminas una track en una noche, conectas con alguien en otro país, alguien sube tu canción en un reel, se siente bien.
Y luego están los días pesados. Cuando sacas una rola y a veces ni tus compas la escuchan. Cuando te preguntas si todo esto vale la pena. Cuando dudas de tu sonido, de tus letras, de ti mismo.
Pero ahí es donde entra la diferencia: tú decides si seguir o parar. Nadie más lo hace por ti.
Marketing: el otro ritmo a tocar...
No basta con hacer rolas. Tuve que aprender a moverlas. A diseñar mi propia portada, escribir descripciones, entender TikTok, subir reels, hablarle a la cámara, entender hashtags, subir la rola a DistroKid, hacer playlist pitching, mandar mensajes a artistas para colaborar… todo eso también es parte del ritmo como artista independiente.
No se siente tan artístico a veces, pero descubrí algo: el marketing también es creativo, solo hay que encontrarle el ritmo.
Seguir intentando
He hecho beats que pensé que iban a romperla. He sacado rolas que para mí eran oro y pasaron desapercibidas. Pero también he tenido momentos donde, sin esperarlo, alguien de otro país me dice que esa rola le pegó justo donde debía.
He colaborado con artistas que nunca he visto en persona. Hemos creado canciones por mensajes, por notas de voz, por feeling compartido a distancia. He planeado ideas de videos musicales que aún no filmo, pero que ya existen en mi mente como si ya fueran parte del catálogo.
Experimentar: la clave para no quemarte
Una de las cosas más chidas de ser independiente es que no tienes que pedir permiso para probar cosas. He mezclado phonk con sonidos electrónicos, letras en inglés y español, samples de voces clásicas, atmósferas oscuras, ideas callejeras… porque puedo. Porque quiero.
Y porque si no experimentas, te estancas.
¿Y vale la pena?
Sí. Porque yo decidí el ritmo de mi carrera. Porque he disfrutado cada beat que nace de mi mente sin tener que filtrarlo por alguien más. Porque aunque el camino no siempre sea claro, cada paso se siente mío.
¿Qué es el éxito en la música?
Para mí, hoy, el éxito no es un contrato ni millones de reproducciones.
Éxito es poder hacer música que me representa, conectar con otras personas reales en cualquier parte del mundo, crear cosas que antes no existían, y seguir soñando con lo que viene.
Éxito es colaborar, crecer, fallar y volver a empezar.
Éxito es disfrutar el proceso.
Mi experiencia como artista independiente.
– Lumehill
Comments